(Nota previa: sé que llevo publicadas cuatro tartas seguidas, tres de ellas de chocolate, y que dije que tocaba receta salada pero las circunstancias de la vida han querido que fuera una tarta de chocolate otra vez ...:))
Esta tarta es para chocoadictos (o chocohólicos) a los que les gusta el sabor potente del cacao, sin tonterías jaja, está muy buena, y los que sean más de chocolate con leche que lo utilicen, bajando la cantidad de azúcar y listo. La receta la he tomado prestada del blog albahaca y canela, de Liliana, para ella es la tarta más rica de chocolate del mundo mundial, y no anda desencaminada porque está realmente buena. Tiene una textura tipo mousse, con un sabor muy puro, es muy adictiva pero cuidado porque lleva mucho chocolate y llena bastante, podríais echar al traste la operación bikini (a la mieeeerda la operación bikini!), es para degustar en pequeñas dosis :). Hace dos entradas publiqué una tarta que se parece un poco a esta, no sabría deciros cuál me gusta más de las dos, quizá la otra sea algo menos amarga, y lleva queso lo que la confiere una textura especial,pero las dos me encantan, es difícil definirse...probadlas.
Ingredientes para un molde de 18 cm, preferiblemente desmontable:
-140 gr de un buen chocolate negro (yo usé del 70%)
-50 gr de azúcar dividido en dos partes
-2 huevos y medio (porque la receta original lleva 5 para el doble de cantidades, así que he puesto 2 claras y 3 yemas)
-1 pizca de sal
-42 gr de mantequilla
-1/2 vaina de vainilla ( o 1/4 de esencia de vainilla)
Precalentamos el horno 10 min a 180º.
Derretimos el chocolate con la mantequilla, yo lo hago en el microondas durante 1 min (en intervalos de 30 sg para que no haya riesgo de que se queme). Una vez derretido añadimos la vainilla y dejamos que enfríe ligeramente.
En un bol ponemos las claras (recordad que el bol para montar claras esté siempre libre de cualquier resto de grasa, o no montarán) con la pizca de sal. Cuando empìezan a coger cuerpo se echa el azúcar poco a poco. Una vez montadas las paso a un bol y en el mismo cuenco de las claras echo las yemas con el resto del azúca y bato hasta que blanqueen y doblen de volumen. A esta mezcla de yemas le añadimos la mezcla de choco y mantequilla y por último incorporamos las claras con movimientos envolventes y suaves. Lo vertemos a un molde, las paredes las unto de mantequilla y harina y debajo pongo un papel de horno para que sea más fácil de desmoldar después.
La tendremos en el horno 15-17 min, yo la tuve 17 y quedó jugosa pero el corte como véis muy definido, si la queréis en plan súper cremosa tenedla 15 o menos. Para el molde de 25 cm que es el que usa Liliana (con el doble de ingredientes), son 25 min.
Hacía mucho que no os enseñaba mi snailbag, ahora llega la temporada de comer al aire libre y esta tarta es una perfecta merienda para las tardes por el campo, bosque, playa...:)